Cuando, después de tres años de largas búsquedas, aciertos, fracasos y decepciones amorosas, no había encontrado al hombre indicado. La mujer con aires de superación creyó que era momento de "vivir la vida", como todo el mundo le aconsejaba.
La gente que rodea a este prototipo de mujeres (que en etapas todas lo hemos sido o somos) suelen decirles mucho esto de 'vivir la vida'. De hecho, para ellos, creer que son gurúes de las verdades de las relaciones amorosas es su actividad favorita: No pienses, ya va a llegar. ¿Una relación, para qué?. Viví la vida, querida, después te vas a arrepentir.
Yo tengo una amiga que se puso de novia a los 15 con un chico y todos le decían lo mismo cuando se peleaban: "Dejalo, es un tarado, tenes 15 años, no te vas a casar con el". Hoy tienen dos hijos y están felizmente unidos en matrimonio. No se cuán bueno es escuchar los concejos de la gente que te rodea.
Las mujeres que inician esta cruzada de superación tienden a comenzar a escuchar lo que se dice a su alrededor. Esto se debe, a mi parecer, a que piensan: Bueno si en tres años mi método no funcionó, ellos deben tener razón. Pero hay una sola verdad. La única verdad es que la gente que les dice "Tenes un montón que ofrecer, ahora divertite" o "Viví de joda, aprovecha tu juventud" a las mujeres de esta clase, no tienen otra intención que darle una estúpida y banal solución al problema de alguien que esta realmente angustiado y triste, para que este no os rompa más la paciencia con sus bajones, llanto y preguntas existenciales, tales como: ¿Será que no estoy destinada a ser feliz?. ¿Me tocará algún día?. ¿Cómo puede ser que no pueda conseguir un tipo decente?.
Estas personas le ocasionan un daño permanente a las wanna be superaditas. Por que lo único que generan es alentar una actitud, la cual más tarde les provocará el triple de vacío y angustia sentimental que antes.
Vivir de joda, hasta que llegue un príncipe (que nunca llegará, por que la palabra esposo está claramente en la otra punta del mapa gramatical en el que se encuentra príncipe) es provocar lo que yo llamo: Comportamiento HEAVY Rock star
La superadita quiere, con toda su alma, hacer lo que le dicen, lo que le aconsejan: vivir la vida.
Pasado los días, en los que se hizo toda de nuevo: se operó las tetas, bajó 7 kilos en 10 días y se compró ropa en un sex shop de la calle Florida, esta mujer se sumerge en relaciones de sexo, ebriedad absoluta y, si no se drogaba antes, quizás hasta se introduzca a un mundo que, según los demás, la iba a salvar de su triste sentimiento de soledad. Si ya se drogaba (dependiendo en de su cantidad de consumo), probablemente termine en rehab. Pero, evidentemente, el alma de estas superaditas no es otra que la de la vida romántica en pareja, las cenas con velas y los pétalos en la cama. No podrá cambiar su personalidad por el consejo de una amiga que no tiene siquiera un background presentable en su propia vida, como para salir a aconsejar personas. Por tanto, la superadita termina inevitablemente llegando a su casa, con los zapatos de taco aguja en la mano, descalza pisando vidrios de la calle mugrienta, con el maquillaje corrido. Se sirve un vaso de wiskey y, así caliente como esta, se lo toma sin asco. Se toma 2 pastillas para dormir y se duerme con el cigarrillo encendido quemando las sábanas y no ocasionando un incendio, de milagro.
Finalmente, esta clase de mujer vuelve a creer que ser como era siempre es mejor que seguir los consejos ajenos. Que teníamos que sufrir la cantidad de tiempo que fuese necesario. Que podíamos permitirnos vernos tristes y patéticas habiendo sido dejadas por un hombre, antes que despertar con medias de red gruesa en la cama de un tipo que la primer frase que le dice al despertar, lleno de lagañas y aliento a alcohol, es: "Buenoss dias, ¿cómo dormiste, carlita?"
"Mi nombre es Mariana".
MUY buena esta entrada. Seguì escribiendo cosas asì, voy a entrar de vez en cuando para leer.
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